Como todo ladrón, llega sin avisar y cuando menos uno se lo espera. Se escabulle por algún rincón que quede al descubierto, entra y se apodera de todo lo que encuentra. Asà es el glaucoma, el llamado "el ladrón silencioso" de la visión.
Uno de los problemas principales con esta condición de la vista es que en su etapa temprana no presenta sÃntomas. Por eso, es muy fácil que pase desapercibido. El asunto es que, si no nos hacemos un chequeo rutinario frecuente, cuando por fin nos demos cuenta de que el glaucoma nos está afectando, las consecuencias podrÃan ser muy delicadas... e incluso, casi irreparables.
¿Qué es el glaucoma?
La Sociedad Puertorriqueña de OftalmologÃa define esta condición como "la pérdida de la visión debido al aumento de la presión dentro de los ojos y daños al nervio óptico", indicando que "es una de las principales causas de ceguera en personas mayores." Pero eso, ¿qué significa? De forma simple, el sitio MedlinePlus dice que ocurre "cuando la presión del lÃquido que se encuentra dentro de los ojos aumenta lentamente y lesiona el nervio óptico".
¿Por qué ocurre? Los expertos de la Sociedad Puertorriqueña de OftalmologÃa explican que "la alta presión del ojo causa daño a las células que forman el nervio óptico, que es la estructura responsable de transmitir la información visual desde el ojo hasta el cerebro.
La presión del ojo aumenta cuando el fluÃdo dentro del ojo no puede salir por el ángulo de drenaje." Esa acumulación de lÃquido afecta de forma progresiva, atacando primero en lo que es la parte perifÃerica, y comenzamos a ver como por un túnel, y luego se va reduciendo hasta que llega a ceguera.
Los riesgos del glaucoma
Generalmente, el glaucoma se presenta sin dolor o malestar. En su etapa temprana, provoca una pérdida de visión paulatina y el daño que causa es lento. Además, es usual que afecte un ojo más que a otro. Y como la visión está programada para que un ojo compense cualquier dificultad del otro, no se detecta de forma simple la pérdida de visión.
Aunque usualmente afecta a las personas mayores de 60 años, también se han visto casos entre jóvenes y niños. Es la causa principal para la ceguera en personas de la tercera edad.
Según indica la Sociedad Puertorriqueña de OftalmologÃa, una vez el glaucoma ha avanzado, se hará más evidente la pérdida de visión y los problemas para enfocar objetos. También se notarán "aureolas alrededor de la luz y necesidad de cambiar espejuelos frecuentemente."
¿Cómo se diagnostica?
Los médicos coinciden en que no hay una forma simple de diagnosticar el glaucoma. Generalmente el exame de presión intraocular ofrece algunos indicios, pero será un examen oftálmico completo y otras pruebas especializadas las que confirmen la condición.
¿Cómo saber si estoy en riesgo?
Algunos rasgos que te hacen más propensa a padecer de glaucoma son:
Estar sobre los 40 años de edad
Tener historial familiar de la condición
Pacientes de diabetes
Trauma en los ojos
MiopÃa severa
Uso prolongado de esteroides
¿Se puede tratar el glaucoma?
Con un diagnóstico temprano, esta condición puede tratarse para demorar su progreso.
Las opciones pueden ser: medicamentos, cirugÃa láser, cirugÃa convencional o una combinación de éstos, según el Instituto Nacional de Ojos de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).
Pero estos tratamientos están dirigidos a proteger la visión que aún quede, porque lamentablemente se trata de una condición progresiva. La visión que se pierde por el glaucoma nunca se puede recuperar.
Para un examen de la vista completo, visita tu oftalmólogo y dile si has notado cambios en tu campo visual. Allà te harán las pruebas necesarias y ayudarte a tener una buena salud visual. Para conocer más sobre el glaucoma, visita este enlace.
¡Cuida tu salud!